[English Translation] [French Translation] Lo que terriblemente falta en nuestras iglesias son las personas que tomen iniciativa. Tenemos un montón de gente que son relajadas y un montón de gente que se trata solo de ellos mismos. Pero hay algunos de ellos que son personas reales que realmente quieren ver el Reino de Dios bendecido.
Ellos están esperando que cosas sucedan, ellos son los que están entusiasmados con esa única alma que se salvó. Usted lo/a verán en la iglesia mucho antes del inicio del servicio y mayormente son los últimos en salir. Tienen una pasión poderosa por Jesús que lo hacen que se refleje hacia fuera!
Pero, al estar en el ministerio durante 17 largos años, también he visto algunas de esas personas genuinas ser muy decepcionados.
Aquí hay algunas cosas que necesitan tener en cuenta cuando usted está ambicionando el Reino de Dios. Voy a tratar de ser breve y directo!
1. No ignore a su familia
Lamentablemente, uno de los mayores errores que puede cometer es poner su ministerio por encima de su familia. Por eso, tenemos tantos divorcios entre los líderes y vemos a los niños de pastores que odian el ministerio porque perdieron la imagen de un padre sobre su vida. Dar tiempo al ministerio no significa que les quitas el espacio, el tiempo o incluso el “dinero”.
2. No esperes un resultado de la noche a la mañana
La Fundamentación es tan importante. Nos gustan las cosas que suceden de la noche a la mañana pero es importante ver que estamos creciendo en Dios antes de ver todo a nuestro alrededor siendo impactado.
Muchas veces, empezamos a tratar de lograr las cosas con el poder de la gente que te rodea. Si ellos no están listos y usted no está listo, todo se puede derrumbar cuando la presión viene. Comience con usted! No se puede llevar a un futuro a aquellos que no tienen la misma visión y la pasión que usted. Se convierten en un equipaje doloroso que arrastras contigo. Tomo prestada una frase del obispo TD Jake, él diría, “No llevar el pavo a su banquete.”
3. No te olvides de los líderes
No importa lo difícil que es encontrar a los verdaderos líderes de hoy, creo que todavía hay algunos que Dios puede guiarlos hacia su vida para hablarle. Ora hasta encontrarlos! Vivimos en un tiempo difícil, donde los verdaderos padres están desaparecidos. Es a su manera o de ninguna manera.
He visto esta lucha en las relaciones que se desarrollan en dos formas diferente, cuando el enemigo se infiltra en el campamento; cuando el padre o de su líder no entiende la visión o usted la abandona.
Ahora, una cosa es cuando se actúa como el joven David de la Biblia, cuando Saúl quería matarlo, y otra muy distinta es ser un rebelde como Absalón y causo una división. Es importante que usted sepa que la semilla que usted siembra es lo que se cosechará en su ministerio. Siembre paciencia, honor y humildad, incluso cuando la gente no lo ve. Usted necesita hacer su parte. Dios lo llevará más lejos en su gran llamamiento.
4. No te olvides de espera
ESPERAR de la Biblia se escribe como PREPARACION. Esto no significa demora. Dios te ama demasiado como para poner algo en sus manos antes de estar listo. Todo lo que usted va a hacer es estropearlo. Ahora bien, están los que lo hacen de todos modos y más adelante hacen un espectáculo público de sí mismos.
Una de las cosas más difíciles de un ambicioso/a que atraviesa es el período de espera. Ahora recuerde, nuestro Señor Jesús tuvo la paciencia de esperar hasta que cumplió 30 años. (Lea más sobre los planes estratégicos de Dios por medio de espera de mi primer libro, que te voy a enviar al asociarse con nosotros de forma gratuita aquí).
5. No te olvides de orar
Ahora, no importa lo inteligente que eres, o cuántas ideas tienes y lo mucho que sabe, sin la oración todo ello es obra del hombre- Torre de Babel. No hay Dios en él. No permitas que tu pasión te ciegue de ver la importancia de orar
6. Busque consejo con todo su corazón
Todos necesitamos un consejero. Ni tan solo uno puede saberlo todo y además todos cometemos errores. Proverbios 15:22 dice: “Cuando falta el consejo, fracasan los planes; pero con muchos consejeros tienen éxito”. Ahora, eso no significa que usted necesita que todo el mundo le de consejos. Recuerde, elija su consejero cuidadosamente y elija su mentor aun más cuidadosamente. Deje que Dios los traiga a su vida.
7. Cuente con otras personas significativa
El problema empieza cuando piensa que usted es el único ambicioso. Filipenses 2:3 explica por sí mismo cuando dice: “No hagan nada por rivalidad o vanagloria, sino con humildad consideren a los demás más importantes que ustedes mismos.” (Énfasis añadido)
8. Continúe protegiéndose a si mismo
Ahora bien, cuando el éxito llega tendemos a bajar la guardia. Cuanto más entusiasta estamos, es probable que más rápido nos quememos. Por lo tanto, debemos cuidarnos aún más cautelosamente. Me he dado cuenta de que el enemigo trata de infiltrarse, en la decepción y después del éxito. Averigüe cuáles son las áreas de su debilidad y prepare sus guardias fuertes.
9. Agarra una galleta
En otras palabras, respira! No se ponga tan espiritual que se le olvide de que estás en lo natural y que usted esta hechos de carne y hueso. Tómese un descanso con sus amigos. Encuentre tiempo para reír. Dios no se siente mal cuando sus hijos sonríen. Toma una mezcla de frío y relájese = Chillax!
10. Confía solo en Dios
Una cosa que comparto con los mentores es que, “La promoción viene de Dios.” Este en guardia. Esté preparado. Deje que Dios haga el resto. Seguir al hombre es una forma de cavar una tumba de la decepción. No hay manera más grande que la forma en que Dios abre el camino para ti.
Mi esposa, Tiny recientemente compartió un versículo conmigo que lo tengo cerca de mi corazón. Los dejo con esto.
Salmos 37: 5
Encomienda tu camino al Señor;
confiar en él, y él actuará
PD: ¿Es usted ambicioso/a? ¿Qué has aprendido?